09 marzo, 2006

El contacto entre humanos y producto desaparece

Alimentaria'06 Barcelona. Cada 2 años esta feria viene mostrándonos la variedad de alimentos que se producen en España y fuera de él. A simple vista, puede parecer que nuestra gastronomía se ve enriquecida con miles de nuevos productos que mejorarían la disponibilidad de los alimentos, la sencillez o complejidad en su caso sobre la manera de alimentarse y la relación entre espacio y tiempo, o lo que es lo mismo, cantidad y "calidad". A lo que trato de referirme en este caso, y todavía no se hayan dado cuenta, es que las nuevas tendencias dentro de la innovación alimentaria rondan de manera "grossa" la comodidad del consumidor. En estos momentos tenemos unas divertidas bandejas de plástico que albergan en su interior pedazos ya cortados y pelados de casi cualquier tipo de fruta, al vacío, con el eslogan "¡Fruta fresca, pelada y cortada, lista para comer!" Para aquellos que creían que coger una manzana con la mano, pasarla por debajo del grifo y perder 2 ó 3 minutos en pelarla, era algo "fresco y natural", debían de estar equivocados, ahora por un poco más de dinero (a saber cuánto) y un residuo totalmente INDEGRADABLE, pueden gozar de esta novedad.

Pero alimentaria no es sólo transformación hacia la comodidad y la industria del envasado, también encontramos productos tan novedosos como el foie marino y gras de pato, la crema de ron y el barril de 5 litros de cerveza a presión. Además encontramos una exposición interesante sobre los mercados más singulares de nuestro país, como la Boquería o el Mercado de Abastos.
Y ahora me pregunto, ¿es el consumidor el que hace el producto o es al reves?

Jorge Mariscal