05 abril, 2006

Culto al cuerpo... sin pasar por la cocina

Capítulo 2: Inma

¡Venga, un esfuerzo más! ¡Arriba esas piernas! ¡Pensad en esas cartucheras, chicas, fuera michelines muchachos! ¡A quién le gusta toda esa grasa? ¡Viva la cintura de avispa!

¡Arriba, y dos, arriba y tres...! No hay dolor, no hay dolor....y cuando llegue a casa, después de ducharme y quedarme relajadita...una ensalada con queso fresco y a cenar tranquilamente. Pero...¿y qué hago con el hambre que tengo?

¿Es que no sienten lo mismo que yo el resto de los cuerpazos que hay en este gimnasio? Y la monitora ¿cómo lo aguanta?

¡Yo no puedo! ¡Lo siento y siento ser una simple mortal! Toda la vida a régimen, en manos de endocrinos,dietistas, probando miles de dietas milagro de muchos conocidos, de amigos de amigos.."prueba esta dieta, a mí me funcionó y llegué a perder 23 kilos en 3 semanas..."

¡Venga, dadle a esa batuka! ¡Abrimos las piernas y balanceo, a la izquierda, ahora a la derecha..! ¡Vamos Inma, que te desconcentras! ¡Síguenos, venga, síguenos!

¿Pero cómo voy a seguiros, caray? Si no tengo fuerzas, si llevo todo el día con 30 g de arroz blanco y un pececito a la plancha que me recordaba a Nemo... ¡No importa! Con todo lo que estoy quemando hoy puedo permitirme un caprichito para cenar ¿nooo? ¿Tú que dices conciencia?

¡Claro, bonita! No te preocupes, mañana en el gimnasio sesión doble y para comer durante todo el día una de esas barritas sustitutivas y ya está, pero la barrita de chocolate ¿hee? que tampoco hay que pasarse con los recortes.

¡Toc, toc! ¿Hay alguien más dentro de esa cabecita? Me permito entrar en tu calculado mundo de calorías para ofrecerte mi ayuda.Este mundo no es perfecto, ¿por qué has de serlo tú? ¿Quién decide lo que resulta perfecto y lo que no? Puede que no estés contenta con tu cuerpo y quizá podamos salir de esta, al menos, de manera cauta. Con un poco de disciplina, autocontrol y algo de voluntad podamos mantener una dieta sana, equilibrada y que nos llene de salud, que potencie nuestra autoestima y se nos quite esta carita de vinagre que ultimamente nos gastamos.

¿Qué te parece? No será solo una dieta más, cambiaremos algunas de tus costumbres pero creeme, será mucho más productivo y algo más divertido que lo que has probado hasta ahora. No perdemos nada por intentarlo. ¿Seguimos en contacto?

Eva María Martínez